El éxito de un micronegocio está en la administración. Entendamos el éxito como un resultado satisfactorio del negocio, es decir tus ventas crecen al igual que lo hacen tus ingresos y tu rentabilidad.

Los negocios son como las personas, diferentes entre sí. De acuerdo a la oferta de productos o servicios y a la demanda del público objetivo, no es acertado generalizar de que todos los negocios van a crecer a la misma velocidad o que todas las estrategias funcionan, en otras palabras, no hay una fecha establecida para que tu negocio sea exitoso, dependerá de las decisiones que puedas tomar, las cuales irán determinando el curso del mismo, ascendiendo o por el contrario decreciendo.

Muchas veces lo elemental empieza a ser desapercibido por nuestra búsqueda de acciones ganadoras, pero si debes tomar una decisión ¿en basé a qué la debes tomar? Nace la necesidad de poder obtener información, analizarla y llegar a una conclusión. Ya es sabido aquel refrán “Camarón que se duerme se lo lleva la corriente”, en el mar de los negocios dormirse es no obtener información, ni analizarla, y mucho menos tenerla en cuenta en los pasos venideros.

Primera Regla

La primera regla de oro es la trazabilidad de tus ventas, el registro diario te ayudará a responder preguntas claves como: ¿cuál es el producto más vendido?, ¿cuál es el día de mayor venta?, con solo está información puedes conocer tu producto estrella, al cual le deberás dar mayor importancia.

Segunda Regla

El control de inventarios es la segunda regla que deberías aplicar. ¿Te has preguntado si tienes las cantidades necesarias de tu producto estrella para cubrir su demanda? Este aspecto es fundamental para que no dejes escapar ventas por falta de stock. Además de saber cuánto inventario tienes, deberás conocer dónde está para evitar pérdidas o extravíos de mercancía, es decir, conocer en cuál bodega o sucursal se encuentra cada producto.

Tercera Regla

El control del efectivo es la tercera regla de oro, el flujo de caja continúa siendo de gran importancia, ya que te ayudará a tener tus cuentas claras, conociendo el dinero que entra y sale de la empresa a raíz del registro de las ventas, compras y gastos. Este control reduce el riesgo de que se presenten hurtos de dinero en tu empresa.

Cuarta Regla

Las cuentas por cobrar y pagar es la cuarta regla de oro. ¿En ocasiones se te olvida cobrar, pero si te acuerdan de lo que debes?, sí, el día a día, los pedidos, los proveedores, demasiada información para retener. El registro de las ventas a crédito es clave, pues ese producto que entregaste tuvo un costo, por ello presta especial atención a la cartera porque te impacta directamente en la rentabilidad y el flujo de efectivo. Por otra parte, las cuentas por pagar ordénalas a corto y largo plazo, detalla lo que corresponda a arriendo, servicios, sueldos, créditos, proveedores entre otros.

¿Demasiadas reglas para una sola persona verdad?, pues bien puedes hacer uso de un sistema que te ayude con la trazabilidad de las ventas, inventario, efectivo, costos, cuentas por cobrar y pagar. Si tienes está información actualizada en tiempo real, podrás tomar decisiones acertadas, al mismo tiempo que llevas un control, evitando fugas (inventario o efectivo) que pueden perjudicar tu negocio.

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